América Latina bajo la globalización: Repensando la vigencia de la teoría latinoamericana del desarrollo

Este artículo analiza la vigencia de dos postulados centrales de la teoría latinoamericana del desarrollo: la industrialización como camino al desarrollo y la integración regional como paliativo de la dependencia. En las últimas décadas, la revisión teórica de estos conceptos por parte de la cepal y los cambios económicos en América Latina parecen haber restado pertinencia a ambos postulados.

Del desarrollo al “vivir bien”: la subversión epistémica

Los cuestionamientos al desarrollo no provienen sólo de una búsqueda por paliar sus insuficiencias, sino de un deslizamiento de los fundamentos sobre los cuales se piensa y se organiza lo económico. Nuevas epistemologías, provenientes de la región andino-amazónica, conducen a pensar lo económico desde una concepción integral u holística que insiste en la complementariedad como principio básico. De la reproducción del capital, centro de las teorías del desarrollo y de sus prácticas, se pasa a colocar la reproducción de la vida como el eje de comprensión del proceso de reproducción en su conjunto, y como el criterio organizador de lo económico, que dejaría a la vez de ser considerado una dimensión escindida.

La integración y la arquitectura financiera en el tiempo

La integración y la autonomía de la dinámica económica han sido dos temas recurrentes en la historia republicana de América Latina. El presente texto tiene por objeto desenterrar la historia de la integración para que no se siga repitiendo la falsedad de que fue concebida por la CEPAL, en los años de 1950. Como se verá, ni fue concebida por la CEPAL ni tiene como base teórica única el trabajo de Jacob Viner de 1950.

Ajuste estructural como reforma del Estado: una vez más sobre el Banco Mundial en América latina

A diferencia de otros estudios del papel desempeñado por el Banco Mundial en América latina durante el reciente auge del neoliberalismo, que enfocan el ajuste estructural y la reforma del Estado como procesos paralelos, este trabajo sostiene que se trató de un único proceso, donde el ajuste fue la verdadera reforma del Estado -sin perjuicio de la diferenciación analítica de ambos aspectos-. El rediseño profundo de la organización y el funcionamiento de la economía y sus articulaciones externas aceleró cambios en las relaciones de poder entre clases y otros grupos sociales y dentro de ellas, cuyas dimensiones políticas se proyectaron al terreno estatal. El involucramiento del Banco Mundial en este proceso a partir de la década de 1980 es analizado desde una perspectiva de más largo plazo que permite destacar el papel que el organismo desempeñó, en diferentes situaciones, en la política exterior de su accionista mayoritario -el gobierno de Estados Unidos- así como los reacomodos teóricos y operativos que los escenarios político-institucionales de la última década, en lo que a menudo se presenta como un “después” o un “más allá” del neoliberalismo, le plantean a ambos.

Campaña por la descolonización en América Latina de Puerto Rico a las Malvinas

Para la comunidad internacional la autodeterminación es el derecho de un pueblo a decidir sus propias formas de gobierno, perseguir su desarrollo económico, social y cultural, estructurarse libremente, sin injerencias externas y de acuerdo con el principio de igualdad. Acertadamente se le añade el adjetivo libre, lo cual significa que no basta que un pueblo sometido al colonialismo, en el cual se reprime a los que luchan por la independencia y se menosprecia a través de la educación y la propaganda, el idioma y la cultura de ese pueblo, vote por opciones supuestamente descolonizadoras.

Para que una votación al respecto pueda considerarse como un ejercicio del derecho a la libre determinación, el país antes tiene que ser libre.

"Si tratados de libre comercio no contemplan políticas que propicien incorporación de valor agregado a recursos estratégicos nacionales, están atentando contra seguridad regional"

Tras décadas de dictaduras cívico-militares en América Latina que abrieron el camino durante el final del siglo XX en el continente al malhadado modelo neoliberal para profundizar el expolio de los recursos naturales combinando represión a través de la doctrina de Seguridad Nacional y ajustes draconianos en lo económico que ahogaron a los pueblos en la desesperación y la desesperanza, hablar hoy en día en la región suramericana de un nuevo concepto de defensa, es un progreso sustancial que nadie habría podido imaginar hace apenas un par de lustros.

Sostener para profundizar, profundizar para sostener

El proceso de cambio en Bolivia consolida su avance con los resultados de las elecciones del 12 de octubre y Evo Morales se convertirá en el Presidente que más tiempo ha gobernado Bolivia. Ni un solo reproche a un Presidente forjado en las luchas antiimperialistas, anticoloniales y anticapitalistas que en la noche del triunfo electoral tiene la humildad de dedicar la victoria a un Fidel que seguro estaba viendo el discurso con una sonrisa en los labios y un Chávez que estaba muy presente en todos los que celebramos la victoria en la Plaza Murillo.

¿Por qué ganó Evo?

La aplastante victoria de Evo Morales tiene una explicación muy sencilla: ganó porque su gobierno ha sido, sin duda alguna, el mejor de la convulsionada historia de Bolivia. “Mejor” quiere decir, por supuesto, que hizo realidad la gran promesa, tantas veces incumplida, de toda democracia: garantizar el bienestar material y espiritual de las grandes mayorías nacionales, de esa heterogénea masa plebeya oprimida, explotada y humillada por siglos.