Importancia del sector industrial para el desarrollo de la economía brasileña

En el presente artículo, basado en los postulados de Kaldor sobre las fases del desarrollo, se concluye que —a pesar de haberse modernizado gracias al proceso de apertura económica— la estructura industrial brasileña muestra una evolución caracterizada por el aumento de la participación en la producción de bienes de bajo contenido tecnológico.

América Latina: el “cisma del Pacífico”

Promovido por México, Chile, Perú y Colombia el “cisma del Pacífico” tiene más importancia ideológica que económica dentro de América del Sur. Políticamente se trata de una pequeña franja del proyecto Obama de creación de un área de reafirmación del poder norteamericano en el Pacífico.

“Brasil era naturalmente el líder, hoy la cosa es muy complicada. El continente se dividió, está el “Arco del Pacífico”… Entonces de alguna manera perdemos nuestra relevancia política en el continente que era incontestable. Nunca llegamos a pensar una negociación a fondo con los Estados Unidos, siempre tuvimos miedo”. F.H. Cardoso, Valor Económico, 30 de noviembre de 2012.

XVIII Conferencia Anual de la UIA: Palabras de la Presidenta de la Nación

Muy buenos días a todos y a todas.

Querida amiga, compañera Presidenta de la República Federativa del Brasil, Dilma Rousseff, bienvenida a la Argentina, bienvenida también toda la extensa comitiva que la acompaña de funcionarios, de empresarios; señores gobernadores de las distintas provincias argentinas; legisladores; señores empresarios argentinos: luego de la intervención del titular de la Unión Industrial Argentina, que logró conjuntamente con sus pares brasileños este encuentro que yo creo que debe ser el primero de muchos más que se sigan sucediendo porque siempre he escuchado hablar de la integración desde el reclamo o desde el deseo.

Argentina y Brasil: desafíos macroeconómicos

En la década de 1990, Argentina y Brasil siguieron estrategias económicas parecidas. Sin embargo, las crisis cambiarias que Brasil sufrió en 1998-1999 y la Argentina en 2001-2002, acabaron siendo un punto de inflexión, ya que después de las crisis los dos países optaron por regímenes macroeconómicos muy diferentes. Este artículo tiene como objetivo discutir las experiencias de Argentina y Brasil bajo estos distintos regímenes macroeconómicos. Particularmente queremos analizar: 1) las principales características de los dos regímenes macroeconómicos; 2) las razones que llevaron a los argentinos y los brasileños a optar por estrategias diferentes después de sus respectivas crisis cambiarias; 3) los resultados alcanzados por los dos países en la década pasada; 4) los principales desafíos que estos dos regímenes enfrentan hoy.

Brasil: Crisis financiera internacional y políticas anticíclicas

En este trabajo se evalúa la eficacia de las medidas anticíclicas adoptadas por el gobierno brasileño para mitigar los efectos de la crisis de las hipotecas de alto riesgo. En este contexto, se analizan las repercusiones de las políticas monetaria, fiscal y crediticia en algunos de los principales agregados macroeconómicos. El análisis empírico reveló que la política crediticia expansionista fue un factor decisivo para aumentar el consumo de las familias y el producto agregado durante el período de la crisis. Mientras que la política monetaria expansionista también fue importante para incrementar el producto agregado durante dicho período, los gastos relativos a las inversiones no resultaron sensibles a las políticas anticíclicas.

A comienzos de la década de 2000, pero sobre todo entre 2003 y 2007, la economía mundial presentaba un marcado dinamismo, acompañado de altas tasas de crecimiento económico y estabilidad de los precios, de manera tal que se creía que los gobiernos habían dominado los ciclos económicos.

Los pueblos del mundo frente a los avances del capitalismo: Rio +20 y más allá

Los gobiernos de todo el mundo se reunirán en Río de Janeiro, Brasil del 20 al 22 de junio de 2012, para supuestamente conmemorar 20 años de la "Cumbre de la Tierra", la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, que estableció por primera vez una agenda global para el "desarrollo sostenible". Durante esa cumbre, en 1992, se adoptaron tres convenios internacionales: el Convenio sobre la Diversidad Biológica, el Convenio de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático y el Convenio de Lucha contra la Desertificación. Cada una de ellos prometía poner en marcha un conjunto de acciones destinadas a proteger el planeta y la vida sobre él, y contribuir a que todos los seres humanos gocemos de una vida digna.

Río+20: trampa cazabobos

A escasos días para la realización de la Conferencia Mundial sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo (Río+20), en la ciudad de Río de Janeiro, Brasil, lo primero que salta a la vista es el “síndrome de los hechos cumplidos”. Quienes crean que todavía es posible intervenir en la modificación de los documentos y tesis que serán “discutidos” en su seno, están totalmente equivocados. Ya todo está acordado, el documento final ya fue elaborado y durante la Conferencia, solo se oirán discursos y habrá una aprobación final. Al respecto, preocupa ignorar cual es la posición oficial de Venezuela ante el tema central del evento que consiste en el nuevo concepto de la “economía verde”. En tal sentido solo conozco la valiente “Declaración del Parlamento Latinoamericano Hacia Río+20” que fuera aprobada recientemente y por unanimidad, a solicitud del Grupo Parlamentario Venezolano que preside la Dip. Ana Elisa Osorio.

La crisis mundial y la economía brasileña

El principal reto de este artículo es analizar si la economía brasileña cuenta con herramientas para hacer frente a una crisis de escala mundial. En la primera parte, son reanalizados los aspectos más relevantes del funcionamiento del capitalismo de las últimas décadas, con énfasis en el papel desempeñado por el capital ficticio, y son recordados los despliegues de la crisis en el momento actual. En la segunda y tercera partes, dedicadas a Brasil, son descritas las políticas contra cíclicas realizadas por el gobierno brasileño en 2009 y discutido hasta qué punto Brasil puede hacer frente, sin ayuda, a una nueva retracción de la demanda y de la liquidez mundial. Entre otros aspectos es dada especial atención a la exposición de la economía al movimiento de los capitales con sus desdoblamientos, tanto en el cambio como en el balance de pagos y en las finanzas de las empresas.