Asamblea General Constituyente del Año XIII

La conmemoración este año de los doscientos años del establecimiento de la Asamblea Constituyente del año XIII es muy oportuna, porque nos recuerda las luchas de nuestros revolucionarios de la primera independencia, a pesar de y contra los enemigos externos e internos; hace docencia sobre el coraje de tomar medidas de cambios cuando es necesario hacerlo, mostrando que no existen tótems sagrados que no puedan voltearse o eliminarse. Además, como también ocurre en el presente, nos enseña a ser optimistas en el proceso transitado, aunque las poderosas fuerzas que se oponen parecerían indicar lo contrario.