Militarismo keynesiano y economía estadounidense
El expositor afirma que la cuestión de los gastos militares estadounidenses ha pasado por tres etapas: la época del militarismo keynesiano que empezó alrededor de 1949; el proceso de desaparición de esta etapa que comenzó tras la larga crisis de los años setenta, con las recesiones de 1973-1975, y el doble movimiento de 1979-1980 y 1981- 1982. En su opinión, aunque en parte murió el keynesianismo militar, los gastos militares siguieron en los años ochenta con el reaganismo, un gran movimiento de revancha, etapa que caracteriza como militarismo redistributivo. Fue algo que duró no más de una década; luego hubo otro enfoque, el del militarismo global. El disertante explica esos tres momentos, pero ello no implica que los elementos del keynesianismo militar hayan sido dejados de lado. Lo más preocupante -dice- es que hoy, quizá más que en otro momento de la historia de Estados Unidos, la opinión pública adhiere a este militarismo no tanto por el propósito mismo con el que se usan las armas sino como modo de impulsar la economía. Los gastos militares tienen, para esta visión, efectos positivos para gran parte del aparato productivo estadounidense; no se trata solamente de invertir en tecnología y en construcciones militares, declarando obsoletas las armas anteriores, sino que hoy la mayor parte de la política exterior de Estados Unidos está orientada a propósitos militares, con una actitud conquistadora.