Dos de las explicaciones más frecuentes difundidas en el ámbito científico y político en general acerca de la crisis financiera mundial tienen como núcleo conceptual central, por un lado, a la tesis de la financierización, que postula la primacía del capital financiero sobre el productivo y, por otro lado, a la tesis de la teoría del subconsumo, cuyo principal argumento refiere a la crisis como producto de la creciente desigualdad social global, cuya consecuencia supone una coyuntura de insuficiencia en la demanda.

Desde la perspectiva del autor, ninguno de los dos marcos teóricos arriba mencionados pueden ser tomados para comprender cabalmente la crisis financiera mundial (a pesar de que ambos tengan elementos cuya relevancia es indiscutible). Es por ello que en el presente artículo se propone explicar dicha crisis desde la perspectiva marxista, es decir, ahondar en la indagación de las contradicciones propias e inherentes de la acumulación capitalista como causas de la misma.