50 años de RE: "Materiales básicos para la comprensión de la economía y para la investigación en ciencias sociales"
Son muchas las alegrías que generan los cincuenta años de Realidad Económica. Su permanencia, continua en las ciencias sociales de Argentina es un hecho absolutamente halagüeño y positivo. Sólo un puñado de publicaciones científicas transitó una estabilidad semejante, que permitió la formación y difusión de materiales esenciales para desentrañar innumerables ejes temáticos del devenir argentino y para ordenar y comprender la evolución de la sociedad, la economía y la política en Argentina.
Su persistencia y continuidad se diferencian notoriamente de la historia argentina, que transitó innumerables rupturas, siempre destructivas, expresadas en quiebres institucionales, promovidos por golpes civiles – militares e implementados por dictaduras violadoras de los derechos humanos. También Argentina internalizó desindustrializaciones promovidas por las autoridades políticas y económicas como las de la segunda mitad de los años ´70, la de la década de los años ´90 y la reciente, acaecida durante el último gobierno neoliberal, monetarista que discontinuaron y destruyeron acumulaciones de capital y de organizaciones. En esos momentos se destruyeron siempre bases de infraestructura física, económica y de conocimientos.
Las páginas de Realidad Económica contienen innumerables trabajos explicando las génesis y consecuencias de esos quiebres y pérdidas de acervos de capital, que degradaron la vida cotidiana y los ingresos y empleos de la población. En sus divulgaciones radica una de las virtudes de la continuidad y la permanencia de Realidad Económica y sus aportes esenciales: desde sus páginas se promovió la democracia representativa, se denunciaron las violaciones a los derechos humanos y se promovieron repetidamente la industrialización, la expansión y el conocimiento de las producciones agropecuarias, los modos del desarrollo tecnológico y la formación de bases de infraestructura física y educativa como ejes ineludibles del desarrollo económico y social de Argentina. Se criticaron siempre los planteos sobre simplificadores y primitivos que han basado y basan sus diagnósticos y propuestas de corrección de la economía sobre restricciones lineales de la moneda local y del gasto público, e incluso sobre la eliminación de la moneda local, y que durante su aplicación provocaron regresiones significativas en los ingresos y en el bienestar de la población, pérdidas de bases productivas y de conocimientos, al desencadenar quiebres perversos en el devenir de nuestra sociedad.
También las páginas de Realidad Económica se abrieron al pensamiento y la explicación de otras economías latinoamericanas y mundiales y que sirven, desde el cotejo, para entender las evoluciones de Argentina.
Realidad Económica poseyó esas dos continuidades, esenciales y positivas. Cincuenta años de publicación constante, entregando materiales básicos para la comprensión de la economía argentina y para la investigación en ciencias sociales. También estructuró, siempre, líneas de pensamiento que, de haber sido ejes de sustento de las políticas económicas y sociales, hubieran posicionado a Argentina en umbrales de bienestar superiores a los que actualmente se encuentra. Y ambas continuidades ocurrieron siempre preservándose una cualidad no repetida por muchas otras publicaciones: se cumplieron rigurosamente los tiempos previstos y prometidos de lanzamiento de cada ejemplar de la revista.
Otro de los atributos esenciales de Realidad Económica es que entregó, desde sus tapas y sus páginas, ilustraciones que constituyen lecturas de enorme utilidad de Argentina y que merecen, sin duda, ser parte de un volumen que los integre y divulgue como forma de leer la historia argentina desde un modo no frecuente.
Por último merecen un enorme reconocimiento los padres fundadores de Realidad Económica y las instituciones que la sustentaron y que dieron continuidad y vigencia también al Instituto Argentino para el Desarrollo Económico, IADE. La capacidad de gestión no es un atributo promovido y abundante en Argentina. Pero en el IADE existió desde sus inicios. Igualmente es un hecho en extremo positivo el recambio generacional que constantemente se promueve en el Instituto y que seguramente dará continuidad, por muchísimas décadas, más a Realidad Económica.
* Economista y ex vicepresidente del IADE / Noviembre 2020.