¿Economistas o astrólogos? La economía de los noventa.
Crítica al libro de Alfredo Zaiat.
En ¿Economistas o astrólogos? Alfredo Zaiat realiza un pormenorizado racconto de los principales legados del huracán neoconservador que arrasó nuestro país en el transcurso de los años noventa. En ese marco, analiza con notable claridad y precisión el papel desempeñado por un número reducido –aunque muy influyente– de “economistas astrólogos” en la formulación, la justificación y, en no pocas ocasiones, la implementación de muy diversas políticas públicas que, amparadas en el –siempre utilizado por el neoliberalismo (sobre todo, en su extrema versión vernácula), aunque nunca corroborado en el mundo real– supuesto del “libre juego de la oferta y la demanda”, resultaron ampliamente funcionales al proceso de acumulación y reproducción ampliada del capital de ciertas fracciones del poder económico local. En las consideraciones introductorias, el autor destaca algunos de los rasgos distintivos del “economista astrólogo”: “Una de las características de estos tiempos ha sido la omnipresencia de la figura del economista, que se ha presentado como imprescindible para indicar qué hacer con la economía; con ese halo ha contribuido en forma notable a las transformaciones sociales, políticas y económicas de los ´90. Se trata de ese economista de pensamiento neoliberal que, con un respaldo pretendidamente científico, estableció qué es lo que se puede y lo que no se puede hacer en materia de política económica. Sostiene un discurso que expone como técnico pero resulta fundamentalmente político e ideológico. Con esa lógica de receta única define como inviable cualquier planteo de un programa económico alternativo... el neoliberalismo es a la economía neoclásica como la astrología es a la astronomía. En ambos casos se necesita mucha fe ciega para pasar de lo uno a lo otro”.