El éxodo de Twitter

Bots que son usina de contenido violento y discriminador; desinformación y falacias conspirativas avaladas por un mecanismo de verificación que consiste en el pago de una cuota como patente de corso; shadow banning (reducción de alcance) de temas y cuentas que critican a la extrema derecha; y un dueño que se comporta como monarca absoluto y eliminó los equipos técnicos que la empresa tenía previamente para moderar contenidos ilegales son el combo que citan los diarios The Guardian, de Londres, y La Vanguardia, de Barcelona, en su éxodo de Twitter (X), la plataforma de Elon