Trump 2.0: repliegue estratégico y dominio continental
Como ya se viene observando en la práctica, la nueva Estrategia de Seguridad Nacional (ESN) de Estados Unidos pone sobre el papel la prioridad de asegurar el dominio “hemisferio occidental”, dentro de un marco general de repliegue estratégico a nivel global. Incluso, el documento presenta un “Corolario Trump” de la Doctrina Monroe: al igual que el corolario Roosvelt anunciado en 1904, la premisa “América para los [norte]americanos” ahora tiene una carga mucho más asertiva y agresiva.
La doctrina Monroe de Trump
A 5 meses de las elecciones presidenciales, Donald Trump, refuerza su intención de mantener la hegemonía sobre la región y aislar la influencia de China.
Trump y la doctrina Troilo
En noviembre de 2013 el entonces Secretario de Estado, John Kerry, anunció ante la Organización de Estados Americanos el ocaso de la Doctrina Monroe. En febrero de 2019 el entonces Secretario de Estado, Rex Tillerson, recordó en la Universidad de Texas el sentido, alcance y valor de la Doctrina Monroe. En abril de este año en una entrevista el Consejero de Seguridad Nacional, John Bolton, aseguró que en la administración Trump “no hay temor de aplicar la Doctrina Monroe”. En mayo en un texto para el Gatestone Institute Jiri Valenta, del Begin-Sadat Center for Strategic Studies, invocó la necesidad de recurrir a la Doctrina Monroe y desplegarla en Venezuela. En junio en un artículo en la revista Proceedings del US Naval Institute el Teniente Andrew Kramer reclamó una “nueva” Doctrina Monroe para el manejo de las relaciones entre Estados Unidos y Latinoamérica.
