El compañero Eric

Cuentan los amigos de Eric Hobsbawm que mantenía una relación muy amorosa con Marlene Schwartz, su mujer en los últimos 50 años. Se acariciaban en público y se regalaban tarjetas de San Valentín a veces con tanta afinidad que compraban la misma. Fue ella la que recibió una carta pocas horas después de la muerte de su marido. “A lo largo de la última década leí con orgullo las entrevistas en las que él atribuía a nuestro gobierno la responsabilidad de ‘cambiar el equilibro en el mundo y llevar a los países en desarrollo al centro de la política internacional’”, dice el texto tras confesar una “profunda tristeza” por la noticia de la muerte de Hobsbawm, de quien fue un honor “haber sido su contemporáneo”.