«Más de 4.000 kilómetros de cordillera y una extensión territorial envidiable hacen que la Argentina sea blanco de numerosos proyectos mineros», sentenció en la mesa de apertura el presidente del IADE, Sergio Carpenter Vallejos. A la par, destacó que han sido «los cambios normativos del Estado neoliberal de los años 90» los que promovieron el interés de las multinacionales mineras por los recursos naturales del territorio latinoamericano, que incluyen oro, plata, cobre, cinc y estaño.

También tuvo lugar en el contexto de las jornadas el panel «La minería en la Argentina de la posconvertibilidad. El impacto en las regiones y en la provincias», coordinado por el investigador Francisco Abramovich e integrado por los docentes Marcelo Giraud y Alejandro Rofman; el ingeniero Hugo Nielson y el licenciado en Relaciones Internacionales Roberto Adaro.

«No ponemos en duda que la minería es una actividad necesaria e imprescindible, pero debemos analizar si los métodos por los cuales se efectúa su extracción son útiles al desarrollo del país», expresó Adaro. En igual sintonía, Nielson reconoció que «no se puede vivir con una minería a cualquier precio», aunque aclaró que cualquier iniciativa industrial, sea o no de corte extractivista, «tendrá impacto sobre el ambiente». Por su parte, Rofman y Giraud destacaron la importancia de que los Estados y sus sociedades sean los que decidan qué hacer con los recursos estratégicos, y no las grandes corporaciones trasnacionales.

La mesa redonda «Minería y después. Las industrias extractivas y las alternativas para el desarrollo en la Argentina y América Latina», fue otra de las actividades realizadas. En dicho marco, habló Nicolás Gutman, licenciado en Ciencia Política, quien remarcó que en la actualidad «no está en discusión la falsa dicotomía entre minería sí o minería no» sino que el debate «se da en torno de la megaminería, que, por sus características –como los riesgos sobre la salud por la utilización de compuestos cianurados–, son significativamente diferentes a de las producidas por la extracción tradicional». El doctor en Ciencias Ambientales Gian Carlo Delgado Ramos agregó que no puede soslayarse el continuo aumento en la producción mundial de minerales, extraídos de los países subdesarrollados.

A su turno, Ana María Fernández Equiza habló sobre el desarrollo en Latinoamérica; marcando que no sólo debe privilegiarse el crecimiento económico sino además contemplar la preservación del ecosistema, el trabajo genuino para las comunidades y el rol conjunto de los Estados para proteger sus riquezas no renovables.

Revista Acción - 2° quincena de febrero de 2012