El trasfondo del programa financiero de Macri
La multitudinaria marcha del viernes 29 de abril 2016 debe ser un hito, el límite preciso del avance del capital especulativo después de 150 días de jolgorio, incluso lo hicieron por encima de las inconsistencias técnicas de la administración macrista.
Gracias a la movilización y el acto de cierre del mismo, no el macrismo más duro que no logra comprender, sino para el gran capital nacional y extranjero que está detrás del gobierno y que es su principal beneficiario, sabe, ya tiene claros y tajantes indicios que le gente se cansó y que no se puede seguir expulsando trabajadores, aumentar alegremente los precios y ganar lo que se gana en la “timba” financiera, sabedores que lo paga el pueblo argentino en el presente y lo va a pagar en el futuro con la hipoteca que deja la política de endeudamiento por obligaciones de dudoso (más que dudoso incierto) origen y de nuevas emisiones de títulos que lo único que busca es, aprovechando las severas limitaciones técnicas de la administración, que le permite comprar dólares y fugarlos, en una nueva y “agiornada” vuelta de la “tablita” de Martínez de Hoz y de la Convertibilidad.
Reconversión y desocupación
En un contexto de sobre producción relativa de la economía mundial, con epicentro del problema en los países más desarrollados, las mercancías ofrecidas inundan los mercados mientras que la demanda global se ve reducida por vía de las políticas de austeridad aplicadas, y la consecuencia es que se agrava la crisis de sobreproducción. La guerra comercial es inevitable, y todo este ambiente pone a nuestro país en situación vulnerable.