La mano visible del Estado y la mano invisible del mercado. ¿Por qué la salud es más que un contrato entre partes?
La pandemia del COViD-19 ha evidenciado para todxs algo que la epidemiología conoce desde su origen: la salud individual está en estrecha relación con la salud social o colectiva. su cuidado –eje de los sistemas sanitarios– es entonces el pilar del cuidado colectivo, que se organiza en torno a la salud pública (en el sentido poblacional).
Es así que el funcionamiento del sistema de salud requiere regirse por algunas direcciones comunes sobre todo en Argentina, donde el sistema es sumamente segmentado, fragmentado y desigual. Estos rasgos se suman a la poco articulada y coordinada interdependencia entre los subsectores (público, privado y seguridad social). Los modelos que excluyen la posibilidad de comprender los límites difusos y muchas veces inexistentes entre los subsectores desconocen el real funcionamiento del sistema sanitario.