Solidaridad del IMFC ante la nueva amenaza a la Cooperativa B.A.U.E.N.
Entre las diversas respuestas que la imaginación popular supo encontrar a la profunda crisis económica y social estallada a fines del año 2001 se destaca el fenó- meno de las empresas recuperadas en forma cooperativa. Ante el peligro de desaparición de la fuente de trabajo y la correlativa destrucción de los bienes y equipos de muchas empresas cerradas o quebradas, y pese a la falta de un marco jurídico apto para proveer una salida adecuada, los trabajadores afectados encontraron la forma de organizarse y reiniciar la actividad de estas empresas. Resulta particularmente destacable el caso de los trabajadores del Hotel Bauen. Construido con créditos nunca cancelados del BANADE, la empresa fue objeto de sucesivas transferencias de dominio. Cuando dificultades financieras llevaron al cese de la actividad y en medio de diversas controversias judiciales, los trabajadores asumieron el control del proceso y lograron reanudar la actividad hotelera. La reactivación no se limitó al desarrollo de la actividad habitual, hecho meritorio en sí mismo, sino que además la cooperativa se convirtió en sede de múltiples actividades sociales y culturales, y pasó a actuar asimismo como verdadero hogar de tránsito para las delegaciones de organizaciones sociales del interior, que debían concurrir a la Capital Federal para realizar gestiones ante organismos públicos e instituciones sociales.