Llegó el “dólar agro”
El Gobierno anunció esta tarde que el 8 de abril comenzará a regir un “dólar soja 3.0”, vigente hasta el 31 de mayo, y un “dólar agro”, que se extenderá hasta el 30 de agosto para 30 economías regionales.
Novedades Cambiarias de la Semana
1) Se confirmó la flexibilización en las metas de Reservas, ¿alcanza?
2) El BCRA empezó con el pie izquierdo el 2T y continúa la sangría de Reservas
3) Zanahorias y garrotes para llegar a las elecciones
4) Crawling peg: ¿el 6% llegó para quedarse?
5) Brecha estable y financieros con récords nominales
1) Se confirmó la flexibilización en las metas de Reservas, ¿alcanza?
En el informe técnico correspondiente a la cuarta revisión del EFF quedó expuesta la flexibilización en la meta de Reservas para 2023: la meta del 1T se flexibilizó en USD 3.600 M, la del 2T en USD 1.800 M, la del 3T USD 1.500 M y la del 4T en USD 1.800 M. Ahora bien, pese a que se relajó la exigencia en comparación con el punto de partida del acuerdo (bajo el argumento de la sequía), se tornó más exigente el requisito de acumulación trimestral para fines de junio: las RIN deberían incrementarse USD 4.900 entre abril y junio, cuando con las metas previas la exigencia era de USD 3.100 M. Esto es aún más desafiante si tenemos en cuenta que el punto de partida a fines de marzo es inferior al pautado debido al incumplimiento en la meta del 1T (estimamos que al BCRA le faltaron cerca de USD 1.800 M). No obstante, dado que la revisión no refleja la totalidad del impacto negativo de la sequía en sus estimaciones de cosecha, esperamos futuras flexibilizaciones en las metas de Reservas (¿también en las fiscales?) para las próximas revisiones.
2) El BCRA empezó con el pie izquierdo el 2T y continúa la sangría de Reservas
Pese a ser una semana corta de apenas 3 ruedas, el BCRA se desprendió de USD 420 M en el MULC. Dicha dinámica fue producto de una liquidación del agro que continúa en niveles exiguos, pagos de deuda privada (Obligaciones Negociables de YPF), y una demanda neta de privados que se muestra persistente pese a las restricciones vigentes. De esta manera, la autoridad monetaria hiló 22 ruedas consecutivas con saldo vendedor neto, acumulando un rojo superior a los USD 2.300 M desde el 6/3. Como resultado, las Reservas Netas (sin DEG) ya se encuentran en terreno negativo por cerca de USD 600 M. Esta dinámica es -a todas luces- insostenible. En tal sentido, el acotado poder de fuego del BCRA y el agudo recorte en los flujos entrantes de divisas producto de la sequía ponen en jaque la estrategia cambiaria del Gobierno y la búsqueda por evitar el “mal mayor”: un salto discreto del tipo de cambio oficial.
3) Zanahorias y garrotes para llegar a las elecciones
El Gobierno anunció esta tarde que el 8 de abril comenzará a regir un “dólar soja 3.0”, vigente hasta el 31 de mayo, y un “dólar agro”, que se extenderá hasta el 30 de agosto para 30 economías regionales (vino, maní, yerba, té, arroz, madera, entre otras) que cumplan con los requisitos establecidos (abastecimiento del mercado interno, sostenimiento del empleo y participación en precios justos).
En ambos casos el tipo de cambio especial será de $300, valor que no se actualizaría durante la vigencia del programa. Este nuevo tipo de cambio diferencial muestra una brecha del 42% contra el tipo de cambio de referencia (en el dólar soja 1.0 fue del 44% y en el 2.0 fue del 37%), aunque, a diferencia de las versiones anteriores del “dólar soja”, su duración será considerablemente mayor y, por ende, los incentivos se achicarán con el correr de las semanas y el avance del crawling peg.
Mediante el “dólar soja 3.0” las autoridades pretenden fomentar un adelanto en la liquidación de divisas de al menos USD 5.000 M tendendiente a engrosar el nivel de las reservas, aprovechando el mayor tipo de cambio para incrementar la recaudacíon vía retenciones ante un frente fiscal complicado. Recordemos que con el “dólar soja 1.0” se habían liquidado cerca de USD 7.800 M y con la segunda edición en diciembre fueron casi USD 3.200 M.
Por último, si bien el “dólar agro” establece un mecanismo de incentivos que pueden fomentar una mayor liquidación de divisas en el corto plazo, también hay que ver el otro lado de la moneda: 1) es inconsistente intertemporalmente, dado que trae alivio en el corto plazo a costa de reducir la liquidación en el mediano plazo y alterar los incentivos a vender; 2) tiene un impacto monetario relevante (estimamos la emisión neta en cerca de $1,1bn o 0,7% del PIB sólo por el “dólar soja 3.0”), que forzará al BCRA a esterilizar los pesos volcados a la plaza, incrementando aún más los pasivos remunerados del BCRA y reduciendo la eficacia de la política monetaria; 3) probablemente el TC diferencial para las economías regionales genere mayores presiones en la inflación; y 4) le continuará quitando relevancia al TC oficial en el comercio exterior.
Paralelamente, se anunciaron beneficios para los productores en situación de crisis por la sequía y instauró un nuevo régimen de sanciones (suspensión de CUIT e imposibilidad de acceder al MULC) para aquellos exportadores que excedieron el periodo permitido para liquidar divisas (se estima USD 3.700 M), aunque se les ofreció una ventana temporal de 30 días para regularizar su situación.
4) Crawling peg: ¿el 6% llegó para quedarse?
El ritmo de devaluación diario del tipo de cambio oficial continuó por encima del 6%. En las últimas 5 ruedas promedió una TEM diaria promedio de 6,15%, 0,24 p.p. por encima del cierra de la semana previa. En tal sentido, continuamos sosteniendo que la complejidad que impone el “frente de los Dólares” y la necesidad de evitar una mayor apreciación cambiaria le dejan escasos márgenes de maniobra al Gobierno para aplicar este año la tradicional receta electoral de atrasar el tipo de cambio. No obstante, como venimos señalando, no prevemos que se busque desandar el atraso, sino administrarlo, por lo que el exceso de demanda de divisas continuará.
5) Brecha estable y financieros con récords nominales
Pese a mantenerse relativamente estables en las 3 ruedas de la semana, tanto el CCL como el dólar MEP mostraron nuevos récords nominales el día martes. Sin embargo, este miércoles mostraron una leve reducción ($404 y $395 respectivamente) que los llevó incluso por debajo del cierre de la semana previa. De esta manera, con un dólar blue sostenido en $392, la brecha cambiaria promedio cerró la semana en un 88%, 3,5 p.p. por debajo del nivel evidenciado el viernes 31/3. Mantener contenida a la brecha cambiaria es un desafío transversal al “frente de los Dólares”, el “frente de los Pesos” y el “frente inflacionario”.
Ecolatina - 5 de abril de 2023