La Argentina pagó, pero aún debe millones
Fuente. Clarín
El presidente Néstor Kirchner asegura que la Argentina sufrió durante años por seguir las recetas económicas del FMI, especialmente las que generaron el colapso financiero del país en 2001-2002. Saldar la deuda con el Fondo le permite a la Argentina seguir su propio camino en política económica -una política que incluye varias cosas que al FMI no le gustan, como un peso débil y un rol estatal más fuerte en la economía-. Kirchner, además, obtiene un rédito político valioso al enfrentarse al FMI.
Según las encuestas, más del 70% de los argentinos aprobó la cancelación de la deuda con el Fondo. Pero la Argentina sigue debiéndole decenas de miles de millones de dólares a acreedores externos. E irónicamente, dado que Kirchner pagó para ganar cierta libertad, la Argentina tendrá que sacrificar un saludable excedente presupuestario para devolver las reservas del Banco Central. Eso dejará a Kirchner con menos dinero para el tipo de inversión social que sus seguidores de izquierda le están reclamando.