El gobierno de Milei contra el consenso del Nunca Más

El gobierno de Javier Milei no solo ha relativizado el terrorismo de Estado, sino que además ha comenzado a desarticular los organismos estatales de derechos humanos. La visita de un grupo de diputados oficialistas a represores de la última dictadura militar a la cárcel donde cumplen sus condenas no es más que una expresión de la nueva relación con el pasado reciente.

El Ministerio de Justicia de la Nación cierra los Centros de Acceso a la Justicia de los barrios populares de CABA

Son en total ocho centros, la mitad de los 16 que existen en CABA.

De acuerdo a un relevamiento de ACIJ, los espacios que fueron cerrados recibían el 42% del total de las consultas de la ciudad, y seis de ellos estaban entre los diez más requeridos de la ciudad. Atendían especialmente casos relacionados a documentación personal y derecho de familia, como consultas vinculadas a obtención de DNI y partida de nacimiento, temas vinculados a alimentos, régimen comunicacional de hijos e hijas, entre otros.

 

Los DDHH y el Pueblo de la Nación Argentina. El RIGI y la expoliación de Argentina

Art. I, Inc. 2 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos:

“Para el logro de sus fines, los pueblos pueden disponer libremente sus riquezas y recursos naturales sin perjuicio de las obligaciones que derivan de la cooperación económica internacional basada en el principio de beneficio recíproco, así como del derecho internacional. En ningún caso podrá privarse a un pueblo de sus propios medios de subsistencia”.

Del Preámbulo de la Convención Americana sobre Derechos Humanos:

“Reiterando que con arreglo a la Declaración Universal de los Derechos Humanos, solo puede realizarse el ideal del ser humano libre, exento del temor y la miseria, si se crean las condiciones que permitan a cada persona gozar de derechos económicos, sociales y culturales, tanto como de sus derechos civiles y políticos”.

Brillá con la nuestra

Sin la inversión que hacemos colectivamente como sociedad no habría deportistas olímpicos, ni pianistas como Martha Argerich ni especialistas de muchas disciplinas indispensables. Todo viene de esos recursos que decidimos asignar entre todos para que existan bienes y labores que el mercado no valora, pero que hacen vivible esta vida.