El Brasil de Lula y Cardoso: las relaciones peligrosas y las afinidades electivas

En un país donde el sistema electoral obstaculiza las mayorías en el Congreso, y donde cada gobierno necesita alianzas para poder legislar, es la primera vez en 35 años de democracia que puede haber un acuerdo entre los rivales Partido de los Trabajadores (PT) y el Partido de la Socialdemocracia Brasileña (PSDB). Si el rival del PT es Bolsonaro en las presidenciales de 2022, el almuerzo entre Lula y Cardoso augura un apoyo en el balotaje.

Brasil: la cosa Bolsonaro

Los hechos de la historia no se repiten, pero riman como los versos de un largo poema. Escuché más o menos esto de mi amigo Sidney Chalhoub, un prestigioso historiador y profesor de la Universidad de Harvard. También leí una afirmación similar en una de las charlas de Tia Lydia, la odiosa villana de las novelas “El cuento de la doncella” y “Los testamentos”, de la canadiense Margaret Atwood, que describe los horrores de una teocracia cristiana fundamentalista impuesta por la fuerza en algunos de los Estados Unidos.

El plan económico y social del gobierno Bolsonaro

El capitán Bolsonaro ya se comprometió con el “Mercado” a entregar todas las decisiones del área económica al gran Capital, bajo hegemonía del capital financiero y de las empresas extranjeras (personificado en Paulo Guedes y sus Chicago boys, que ponen a Lewy en el BNDES (Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social). Por las declaraciones del presidente electo, será un gobierno comandado directamente por hombres de negocio comprometidos con la reducción del “costo Brasil”, o sea, con el aumento de la ganancia privada. Un gobierno con ese perfil no solo continuaría, sino que radicalizaría la agenda de Temer, a fin de implantar:

El pánico de la derecha brasileña

La derecha brasileña ha realizado su sueño desde 2003: sacar el PT del gobierno. Como no lo ha logrado por medio de elecciones -y se dio cuenta que ya nunca más lo lograría - , optón por el atajo del golpe. Estuvo condenada así a tener como presidente al vice de entonces, Michel Temer, con toda la carga de acusaciones de corrupción.