Globalización y desarrollo
Por qué la ‘crisis del capitalismo’ no existe
Confundimos el malestar en los países ricos de occidente, que resulta de una distribución desigual de los beneficios de la globalización, con una crisis mundial del sistema económico
Precariedad socioeconómica y aislamiento del pequeño campesino en el Ecuador actual
China, el Socialismo y la “Línea de Masas”
En Octubre de 2014, invitado por la Academia Nacional de Ciencias Sociales de China, participé en los Foros Mundiales sobre “El Socialismo como Inevitable Superación del Capitalismo” y sobre el relanzamiento de la política de la “Línea de Masas” de Mao Zedong, realizados en Beijing y en Xiangtan (ciudad de nacimiento de Mao Zedong). Esta experiencia fortaleció mi convicción sobre la importancia mundial de China y que lo que ocurra allí nos afectará profunda y crecientemente a todos, particularmente en regiones como nuestra América Latina, donde China aparece como una alternativa cada vez más importante para ganar independencia respecto de los centros desarrollados del capitalismo. Más aun considerando su central participación en el BRICS (grupo económico integrado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica).
¿Qué tipo de capitalismo es posible en la Argentina?
Las dimensiones financieras del impasse del capitalismo
En febrero publiqué en la web de A L’Encontre un artículo en el que avanzaba la hipótesis de un modo de producción que se encuentra en una situación histórica en la que ya no consigue superar sus límites «inmanentes», tal como fueron explícitamente definidos por Marx, ni los correspondientes a las relaciones del capitalismo con el entorno, de los que se ha tenido conciencia sólo mucho más tarde.
¿Qué tipo de capitalismo es posible en la Argentina?
Actualización del modelo económico de Cuba: desarrollo humano, mercados y capitalismo
Los territorios de la guerra, las guerras del territorio
Los territorios son el centro estratégico de la competencia mundial y las relaciones de poder.
La relación con el territorio es tan vieja como la historia de la humanidad, pero por primera vez, con el capitalismo del siglo XXI, el territorio adquiere signos de finitud. No sólo tiene carácter de objeto –y es tratado como tal–, sino que se ha convertido en un objeto escaso.