Soberanía cognitiva y tecnológica, e integración
En el marco del nuevo ordenamiento regional y global, marcado por la rápida transición hacia economías basadas en el conocimiento y altas tecnologías, que se junta a la exigencia de buscar respuestas a las diversas crisis globales (económica, climática, energética…), es cada vez más evidente que ningún país puede prescindir de desarrollar conocimientos propios y capacidades en ciencia, tecnología e innovación (CTI), sin lo cual arriesga profundizar la dependencia y agudizar la desigualdad.
De hecho, entre los países de la región existe un creciente reconocimiento de que el actual modelo de desarrollo regional, basado en la producción y exportación de commodities y materias primas y la alta dependencia tecnológica frente a las economías más desarrolladas, se vuelve insostenible.
Esta dependencia de una ciencia y tecnología impulsada por países con economías avanzadas dificulta, justamente, que la región pueda responder adecuadamente a sus propias prioridades y las necesidades particulares de sus pueblos. Toda vez, muy pocos países del Sur en forma aislada podrán responder adecuadamente a este reto, ya que implica grandes inversiones y economías de escala. Es por ello que, en el marco de los procesos de integración en América Latina y el Caribe (ALC), se están intensificando esfuerzos para abordar la problemática en forma conjunta.
Banco del sur: el futuro obligado
A más de seis años de la histórica firma de su Acta Fundacional por los presidentes de la Argentina, Bolivia, Brasil, Ecuador, Paraguay, Uruguay y Venezuela (último acto de gobierno del mandato de Néstor Kirchner, 9 de diciembre de 2007) el Banco del Sur aún no comenzó a funcionar.
Sin duda, la puesta en marcha no es simple, dada la necesidad inicial de lograr la aprobación parlamentaria de los países y establecer sus normas de funcionamiento. El proceso, pese a demoras y dificultades (por ejemplo, Brasil no completó su trámite parlamentario), pudo seguir adelante.
Integración regional: para que la unidad no termine transformándose en un sueño
Resulta notorio que la crisis internacional 2007-2008 no fue superada pese a los anuncios recurrentes y equivocados de una pronta, creciente y pujante recuperación de la economía mundial, mientras para América latina se sumaban temores por una coincidencia de factores negativos que están afectando sensiblemente el desarrollo.
Datos y cifras sobre las relaciones entre la Unión Europea y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños
Europa, América Latina y el Caribe comparten profundos lazos históricos que los unen estrechamente. Son socios naturales que buscan intensificar sus vínculos estratégicos en el ámbito social, político y económico.
La asociación EU-CELAC es una asociación para el futuro. Juntas, ambas regiones pueden impulsar el comercio y las inversiones con el fin de crear empleo y crecimiento, así como promover un desarrollo duradero para garantizar un alto nivel de vida para nuestros ciudadanos y luchar contra la pobreza y la desigualdad en todo el mundo.
Declaración Política, declaración de Bruselas y plan de acción de la segunda cumbre UE-CELAC
Nosotros, los Jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) y de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), y los Presidentes del Consejo Europeo y de la Comisión Europea, nos hemos reunido en Bruselas los días 10 y 11 de junio de 2015, con motivo de la II Cumbre UE-CELAC, nuestra octava reunión birregional, con el tema «Modelar nuestro futuro común: trabajar por unas sociedades prósperas, cohesionadas y sostenibles para nuestros ciudadanos».
Reflexiones ante la Cumbre de las Américas en Panamá
Deben estar contentos los que se lamentaban, hace unos diez años, que los Estados Unidos habían “abandonado” su interés por América Latina en aras de ponerle atención a lo que sucedía en el Medio Oriente.
Cumbre de las Américas: panamericanismo y neoliberalismo
Con la CELAC en marcha, la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América consolidada y la UNASUR como realidad política tangible, ¿para qué sirve la Cumbres de las Américas, sino para prolongar la puesta en escena del imperialismo y dar riendas a quienes quieren volver a los oscuros tiempos del sojuzgamiento de nuestros pueblos bajo el peso de “los gigantes que llevan siete leguas en las botas y le pueden poner la bota encima”?
Preparando la agresión militar a Venezuela
Barack Obama, una figura decorativa en la Casa Blanca que no pudo impedir que un energúmeno como Benjamin Netanyahu se dirigiera a ambas cámaras del Congreso para sabotear las conversaciones con Irán en relación al programa nuclear de este país, ha recibido una orden terminante del complejo “militar-industrial-financiero”: debe crear las condiciones que justifiquen una agresión militar a la República Bolivariana de Venezuela.
¿Qué se puede hacer con la OEA?
Para que la OEA pueda darse una función propia reconocida y aceptada es preciso podarla, reorganizarla y trasladarla a una ubicación geográfica más anfictiónica, esto es, más equilibradamente universal que la que Washington DC -con su pesada carga semántica- puede ofrecer.
Retos de la era digital para América Latina y el Caribe
Son destacables los avances registrados por América Latina y el Caribe en la última década en el camino de la integración regional, bajo los nuevos parámetros de autonomía, soberanía y cooperación, con aciertos significativos, sobre todo en el plano político y en materia de defensa. Por lo mismo, llama la atención que la comunicación sigue siendo un tema relegado, siendo que esta era de la comunicación digital implica retos clave para la soberanía y la autonomía, como también para afianzar la participación ciudadana.
Al hablar de comunicación, no me refiero únicamente a lo mediático, pues hoy, no solo gran parte de las áreas del quehacer humano se están reorganizando en torno a la comunicación y las tecnologías digitales, sino que a la par, y en forma acelerada, se están reconfigurando las relaciones de poder mundial.