Ha finalizado el período electoral plagado de agravios y agresiones pero pobre en definiciones ideológicas y de propuestas de acción a mediano y largo plazo. Fue notorio el papel jugado por una parte del periodismo en el tratamiento de algunos problemas que, según creemos, deben merecer nuestra consideración como profesionales en ciencias económicas.

En el mes de marzo encontramos en el diario Clarín una referencia a un supuesto dictamen de la FACPCE que habría recomendado a todos los matriculados “considerar sospechosas” y merecedoras de denuncia a todas las operaciones relacionadas con el blanqueo dispuesto por la Ley 26476. Leyendo detenidamente el dictamen, no se encontraba una sola palabra que avalara esta recomendación aunque contenía una orientación sobre los contenidos de los respectivos dictámenes. Pusimos este hecho en conocimiento de nuestro Consejo y pedimos elevación a la Federación; hasta hoy desconocemos el resultado de nuestro reclamo.

En el mismo diario Clarín del 07 de julio, página 3, encontramos un titular a 5 columnas:”En la campaña se gastó el 83% del presupuesto de viviendas”. Tomando esta noticia al pie de la letra, se trataría de un verdadero desfalco y malversación de fondos porque significaría que ese 83% fue sustraído de su destino original.

Pero si avanzamos en la lectura de la nota, obviamente en tipografía más pequeña, encontramos”Hasta el 28 de junio, justamente el gobierno había ejecutado un 83% del presupuesto anual destinado a viviendas”. Es evidente que no es lo mismo “gastar en la campaña” que “ejecutar un presupuesto”.

Más adelante, la nota dice: “Es obvio de toda obviedad que se trató de dinero público puesto en fogonear la campaña del kirchnerismo en la provincia y en el cono urbano”. Esta temeraria y maliciosa afirmación carece de respaldo en la nota que comentamos y, por ello, consideramos de imprescindible necesidad a cargo de quienes tenemos conocimientos en materia de contabilidad pública, prestar atención a este tipo de publicaciones porque, como es sabido, el titular impresiona enormemente y, por lo común, no es acompañado por el soporte correspondiente.

Fuente: [color=336600]AGRUPACION DE GRADUADOS Y DOCENTES EN CIENCIAS ECONOMICAS “AFIRMACIÓN PROFESIONAL”[/color]