El trabajo y la tierra
El ingeniero agrónomo Guillermo Martini y el abogado laboralista Luis Palmeiro expusieron en una charla organizada conjuntamente por la Cátedra Libre de Estudios Agrarios Ing. Agr. Horacio Giberti y el IADE.
En el Instituto Argentino para el Desarrollo Económico (IADE) se llevó adelante la charla “El trabajo rural en la Argentina”. De la actividad participaron, como expositores, el ingeniero agrónomo y ex director general del Registro Nacional de Trabajadores y Empleadores Agrarios (RENATEA), Guillermo Martini, y el abogado laboralista, docente y especialista en trabajo rural, Luis Palmeiro.
En su exposición, Palmeiro analizó la cuestión legal del trabajo rural priorizando un itinerario por la normativa que afecta al sector. Al mencionar las distintas leyes, el abogado sostuvo que “no hay normativa que no esté acompañada de una decisión política”. Y agregó: “Todas las normas constituyen, en algún momento determinado, una forma de distribución de poder. En el caso del trabajador rural, también. Esto tiene que ver con el apuntalamiento acerca de qué sector se quiere favorecer”.
El especialista destacó la creación del RENATEA -organismo estatal anulado por el gobierno de Macri- como un instrumento para “defender al trabajador y hacer respetar la normativa”. Palmeiro recordó, en ese orden, dos acontecimiento resonantes en materia de avasallamiento de los derechos del trabajador rural: el caso de Luis Miguel Etchevehere –ex titular de la Sociedad Rural Argentina y ahora ministro de Agroindustria- y del actual embajador argentino en España, Ramón Puerta. En ambos casos, señaló Palmeiro, se verificaron instancias graves de incumplimiento de la normativa laboral rural. Palmeiro habló de “condiciones infrahumanas” que pudo detectar el RENATEA.
Asimismo, durante la mesa que coordinó María Isabel Tort, Palmeiro indicó que “es muy difícil hablar de trabajo rural y omitir el tema de la propiedad de la tierra. No hay posibilidad de desvincular una cuestión de la otra. La tierra y el trabajo rural son cuestiones a tener en cuenta en todas las normativas”.
“La no registración implica la invisibilización del trabajador rural”
Por su parte, Guillermo Martini, caracterizó al trabajo rural y explicó algunas de las medidas que se tomaron desde el RENATEA cuando estuvo a cargo de ese organismo.
Martini definió al trabajo rural a partir de distintas caracterizaciones. “Hay condiciones de dispersión que le dan forma a ese trabajo. Argentina tiene 150 millones de hectáreas que tienen algún tipo de actitud productiva. Se mezclan muchas producciones con muchas características diferentes y con distintos patrones tecnológicos”, dijo.
El ex director del RENATEA se refirió también a los efectos de un trabajo determinado por la estacionalidad de la producción, la precarización de las condiciones de contratación y las dificultades para definir al trabajador rural por su papel dinámico en el mundo laboral. “A veces trabaja en el campo y por momentos puede ser albañil”, ejemplificó Martini.
En cuanto a la tarea del RENATEA, el ingeniero agrónomo mencionó 50 casos detectados de trabajo infantil y más de 1200 casos de explotación y trata de personas. “Por primera vez en la historia se encarcelaron a cuatro empresarios que hoy están libres y absueltos”, remarcó Martini sobre los delitos contra el derecho de los trabajadores rurales.
“La no registración implica la invisibilización del trabajador y la trabajadora rural”, alertó finalmente el expositor ante un auditorio colmado del IADE que contó con la presencia, entre otros, de investigadores, dirigentes sociales e integrantes de asociaciones gremiales vinculadas al trabajo rural.