Historia Ecológica de la Ciudad de Buenos Aires
La ciudad de Buenos Aires es uno de los sitios más estudiados del mundo. A los porteños les gusta hablar de sí mismos y leer lo que se escribe sobre ellos. Así, la bibliografía sobre la Ciudad de Buenos Aires abarca varios miles de libros, que van desde los movimientos sociales hasta las leyendas de los fantasmas que habitan sus cementerios. Hay cientos de novelas ambientadas en la Ciudad y todo lo que en ella ha ocurrido, aún lo más irrelevante, está registrado con una minuciosidad de notario.
¿Por qué un libro más sobre Buenos Aires?
Porque la evolución de la cultura significa un continuo cambio en la mirada sobre los mismos hechos y los mismos procesos. La concepción ambiental puso en crisis nuestra vieja forma de pensar la ciencia, en particular la compartimentación de la realidad en disciplinas diferentes. Hace varias décadas comenzamos a preocuparnos por la articulación de ciencias.
En última instancia, los humanos somos animales históricos y la única manera de comprender lo que hacemos es en una perspectiva del largo plazo.
Pero además el ambiente es, antes que nada, una faceta de la cultura. Los pueblos construyen su ambiente de acuerdo con su trama de pautas culturales e intereses. El ambiente no puede comprenderse si no lo consideramos como una construcción social. Y cuando creíamos estar más cerca de integrar las distintas variantes de la ciencia, nos dimos cuenta de que la creación artística es una forma de conocimiento que tampoco puede ser omitida. Así como existen prejuicios que dificultan la articulación de las ciencias llamadas naturales con las llamadas sociales también los hay (y tal vez mucho más fuertes) para integrar el conocimiento racional con el conocimiento artístico.
He incluido temas de la historia ecológica porteña en varias obras anteriores, por lo cual muchos colegas de la comunidad de investigación encontrarán aspectos que ya han leído en otros libros míos. Sin embargo, si apuntamos en esta obra a un uso pedagógico, la necesidad de un texto unificado se hace evidente. No se puede trabajar en docencia sin un texto unificado, ya que no es útil remitir a fragmentos que se encuentran en obras orientadas a otros objetivos. Previsiblemente, la cantidad de información que no se encuentra en mis libros anteriores es sustancial y es lo que justifica esta obra.
En esta entrega, ustedes reciben:
· Un texto de este libro, que va como documento adjunto, referido a la forma en que la cultura porteña percibe su relación con el clima de la región. Se titula Horribles Aires, en recuerdo al modo en que Julio Cortázar, que amó esta ciudad, fechaba sus cartas.
· La información de la Editorial Kaicron sobre el lanzamiento de mi libro: "Historia Ecológica de la Ciudad de Buenos Aires", en primera edición.
· La obra de arte que acompaña esta entrega es un óleo de Pío Collivadino, que muestra los reflejos de la lluvia sobre el empedrado de la avenida Paseo Colón en 1925. Collivadino utiliza un estilo que nos recuerda al de los impresionistas. Lo interesante de este artista es que actuó como vínculo entre el arte elitista y el arte popular, contribuyendo a una síntesis entre ambos, que los prejuicios de su tiempo hacían muy difícil.
Un gran abrazo a todos.