Para poder competir
Comenzó sumando a un ferretero de Rosario, a otro de Mendoza, otro de Santa Fe y a uno de San Justo. Hoy son 48 ferreteros de provincias tan distantes como Jujuy y Comodoro Rivadavia. Entre todos reúnen 80 puntos de vista minorista y dan empleo directo a 1.300 trabajadores. “En los ’90, con la llegada de las grandes cadenas que vendían productos de ferretería, comenzó la caída en las ventas de las ferreterías minoristas. Si bien en la última década las ventas se han recuperado y han crecido, necesitábamos ser más competitivos. Decidí armar un grupo de compras para poder ir a China y ver fábricas y comprar en forma directa lo que no se produce en la Argentina. Una pistola para pintar que Sprayette vende a 1.700 pesos, Easy a 1.000, en China vale 30 dólares, el equivalente a 240 pesos. Es descarado el nivel de sobreprecios que ponen algunos”, cuenta Salomón.
En sus cinco viajes a China ya compró motosierras, desmalezadoras, puntales para la construcción, pistolas para pintar económicas, compresores eléctricos, grupos electrógenos de menos de 6.000 watts, entre otros productos. A todos los miembros de Comprandoengrupo sólo les cobra entre un 2 y 3 por ciento por las compras. “Cualquier ferretería interesada puede sumarse, sólo depende de que no haya otro socio en la misma localidad, porque ofrecemos exclusividad por zona”, cuenta Daniel Salomón.
En 2013 consiguieron la aprobación para importar productos no fabricados acá por un valor de 1,3 millones de dólares; con impuestos incluidos, importó por valor de 2,5 millones de dólares. En 2014 lleva importados productos por valor de 3,5 millones de dólares y espera duplicar la cifra para fin de año. Pero no sólo se ocupa de compras en el exterior, también el grupo de compras está comenzando a hacer acuerdos para comprar y ser representante de marcas argentinas que comercializan, por ejemplo, palas. “Mi objetivo es impulsar y alinear fábricas argentinas chicas para que se puedan complementar. Por ejemplo: una fábrica hace bulones y otra hace cajitas. Yo importo de China la caja con bulones, me acerqué y les sugerí que se unan para complementarse. Pero no es fácil, muchas veces algunos sólo piensan en el corto plazo”, agrega. Hay muchos productos que se importan y que están disponibles en la Argentina, por ejemplo la media sombra.
En busca de ir un paso más adelante, acaba de cerrar un acuerdo con el Banco Credicoop para que financien las compras nacionales e importadas de los socios. A cambio, sus 1.300 empleados podrán elegir la ART del banco o cualquier tipo de seguro para la mercadería o automotor. El poder de este grupo a la hora de comprar y si sigue creciendo puede ser una competencia interesante para las grandes cadenas que pueden pactar menores precios por su volumen.
Para calcular cuál es la facturación de este grupo, Salomón dice que se estima una facturación de 150.000 pesos por empleado por mes. Lo que da 195 millones de pesos por mes, teniendo en cuenta los 1.300 empleados y lo que representa 2.340 millones de pesos anuales. Este emprendedor va por más, asegura que le gustaría participar en gremialismo empresarial. “Los gremios de los trabajadores como la CGT los manejan empresarios y las gremiales empresariales las manejan empleados”, dice, y aclara que ya integra la CGE, la Cámara de Ferreteros de Córdoba, la Cámara de Importadores de la República Argentina y la Mesa Coordinadora Nacional Ferretera (Meconafe). Su objetivo es lograr que las ferreterías barriales puedan competir contra los gigantes.
Revista Veintitres - 8 de julio de 2014