Retenciones, dólar alto, inflación y rentabilidad agrícola en Argentina. ¿De qué se queja el campo?
Una postura más inteligente del sector sería reclamar que el Estado invierta el resultado del aumento de las retenciones en el fortalecimiento de la infraestructura de ciencia y técnica, en el subsidio a cultivos y pequeños productores que hoy no se encuentran favorecidos por las condiciones altamente favorables. De esta manera se evitaría que el modelo de monocultivo de la soja se consolide con los impactos evidentes en los precios de los alimentos y en la concentración de la tierra.
[1] Ver en archivo adjunto trabajo "El campo y los precios relativos", CIEPYC
**Investigador del Centro de Investigación en Economía Política y Comunicación – Universidad Nacional La Plata.
Fuente: [color=336600] CIEPYC / UNLP [/color]