Algunos números sencillos para evaluar la oferta de Macri a los fondos buitre

Una interesante nota publicada por el portal del oficialista Grupo Clarín el 5 de febrero, durante las negociaciones con los fondos buitre, revelaba que según “fuentes oficiales” el gobierno de Macri había “propuesto una quita en torno del 40 por ciento sobre los intereses a devolver a los acreedores” y que la estrategia “apunta a obtener una mayor quita a cambio de pagar en efectivo”. Otro medio publicaba exactamente la misma cifra el mismo día. Ambos calificaban a la oferta de “agresiva”.

Parir la economía kirchnerista

El jueves 15 de diciembre de 2005, Néstor Kirchner anunció en el Salón Blanco de la Casa Rosada que Argentina cancelaría con reservas de libre disponibilidad del Banco Central la deuda con el FMI por un total de 9510 millones de dólares, desembolso que se efectivizó el 3 de enero de 2006.

Ese inmenso esfuerzo de la sociedad de destinar esos miles de millones de dólares sirvió para retirar de la escena local al auditor de los intereses de los acreedores, cuya única receta es el ajuste ortodoxo. Kirchner había afirmado que la cancelación de la deuda con el Fondo Monetario permitiría “ganar grados de libertad para la decisión nacional” puesto que a partir de esa medida “el país será otro: tendrá soberanía política e independencia económica”.

La naturaleza política y la trayectoria económica de los gobiernos kirchneristas

Los doce años transcurridos desde el día en que Néstor Kirchner anunció a los argentinos que no había venido a gobernar para dejar sus convicciones en la puerta de la Casa Rosada, han ido marcando una línea ascendente en la confrontación con el bloque dominante. Como bien se señala en la presente investigación de CIFRA, la confrontación con las patronales agrarias en el 2008 constituyó el punto de inflexión a partir del cual el hostigamiento del poder económico fue persistente y sistemático.

Temas de fondo

Aldo Ferrer y Alejandro Rofman analizan debilidades y fortalezas de la situación económica del país y las incógnitas frente al recambio presidencial. Inserción internacional y restricción externa.

Con el 15 como objetivo

Economistas de la alianza Cambiemos y un ex presidente del Banco Central coinciden en apuntar la devaluación ampliada que planea el macrismo. Éste será uno de los ejes centrales en el debate.

Durante la semana, el economista de la alianza Cambiemos Alfonso Prat Gay planteó la posibilidad de realizar una presentación judicial debido al “compromiso patrimonial” que la venta de dólar en el mercado futuro estaba implicando para el Banco Central. Instantes después, el titular de la entidad monetaria, Alejandro Vanoli, afirmó que llevaba adelante “una política cambiaria y monetaria con gran responsabilidad y con total apego a la normativa vigente”, al tiempo que afirmó que esta modalidad le había permitido al Banco Central registrar una ganancia de casi 5.500 millones de pesos en el último año.

El sueño de Rivadavia

Bernardino Rivadavia fue el administrador de la subordinación de las clases acomodadas post independencia (criadores de ganados y grandes comerciantes) a los intereses de Inglaterra, potencia dominante en pleno proceso de revolución industrial. No solo abrió de par en par nuestra aduana a los productos británicos destruyendo nuestras precarias industrias de tejidos, alimentos, muebles, carros, embarcaciones, etc., sino que lo hizo endeudándonos con la banca inglesa en general, y con la Baring Brothers en particular, por un millón de libras esterlinas, y dio como garantía los ingresos fiscales y la tierra pública (la pampa húmeda y hasta las sierras de Famatina en la provincia de La Rioja), y, como demuestra la historia de esa deuda, una parte menor llegó al país para financiar las importaciones, pero se terminó pagando más de veinte veces esa suma hasta saldarla en la presidencia de Manuel Quintana (quien antes y después de ser Presidente fue abogado principal del Banco de Londres en el Río de la Plata).

El sexo de los ángeles

El déficit fiscal primario de 2015 estará por debajo de la media regional y global. Las distintas mediciones, oficiales y paralelas, lo sitúan entre menos de 1 y hasta 3 puntos del PIB. El déficit financiero, es decir; después del pago de deuda, estará entre el 2 y el 4 por ciento del Producto, siempre según quién lo mida. A pesar de estos números, Argentina asiste a una suerte de revival fiscalista, tanto de los conocidos de siempre, como de algunos que rodean al candidato del FpV. En este contexto, la Ley de Presupuesto 2016, apenas un esquema guía para la distribución de los recursos del Estado, y que en el mejor de los casos brinda algún indicio sobre qué pretende priorizar el gobierno, es tratada acríticamente como una presunta ley de leyes, un empeño repetitivo que ignora el rol histórico del instrumento.

RESOLUCIÓN SOBRE “PRINCIPIOS BÁSICOS PARA LA REESTRUCTURACIÓN DE DEUDAS SOBERANAS”

1. Un Estado soberano tiene derecho, en el ejercicio de su facultad discrecional, a elaborar sus políticas macroeconómicas, incluida la reestructuración de su deuda soberana, derecho que no debe verse frustrado ni obstaculizado por medidas abusivas. La reestructuración debe hacerse como último recurso, preservando desde el inicio los derechos de los acreedores.

La deuda

Para pagar la deuda pública nacional, que es toda la deuda que reconoce el Estado, en pesos y en moneda extranjera, con todos los acreedores –bonistas, organismos internacionales, agencias públicas y el Banco Central–, ¿cuánto debía poner cada argentino en términos de salario mínimo en diciembre de 2003? La respuesta aparece en un paper oficial: 47,1 veces. Es decir, si todos los argentinos cobraran el salario mínimo, en aquel momento hubiera hecho falta que cada uno de ellos entregara 47,1 sueldos para pagar el total de la deuda pública. ¿Y cuánto debe ahora? A diciembre de 2014, 10,3 veces. La deuda pública per cápita, en veces del salario mínimo, cayó de 47,1 sueldos a 10,3; de casi cuatro años de salarios hipotecados a algo más de diez meses.