El imperio de las Finanzas. Bienvenidos al Casino Global
Desde 1980 hasta fin del siglo pasado, la economía de los países industriales creció a un 2,5% anual. En ese mismo tiempo, la liquidez internacional, medida por el aumento de las reservas se multiplicó por más de quince, las operaciones cambiarias crecieron casi un 30% anual y las emisiones de bonos y títulos de deuda un 10 por ciento. El FMI calcula, a su vez, que los fondos especulativos pueden mover entre 600.000 millones y un billón de dólares diarios para especular con divisas u otros activos financieros. Antes de la liberalización de los mercados de capital en los primeros años setenta, el comercio de divisas diario equivalía a seis veces el valor del comercio mundial anual. Hoy equivale a 50 veces ese valor. En la década de los ochenta la negociación de divisas era un 30% mayor que el valor del comercio internacional de bienes y servicios. En 2000 la superaba en un 60 por ciento. El sostenido incremento de la actividad financiera por encima de la producción, el aumento de las obligaciones financieras desligadas de la actividad real es un fenómeno inquietante cuyo futuro es difícil de predecir. ¿Hasta qué punto puede aumentar la actividad financiera y las ganancias que genera por encima de las operaciones de la economía real?