La concesiones viales por el sistema de peaje, lo mismo que todas las privatizaciones de servicios públicos realizadas durante la década de los '90, no sólo están sospechadas de ilegalidad, arbitrariedad y corrupción como se expone en este trabajo, sino que producen una fuerte distorsión económica, encareciendo la comercialización de las producciones regionales del interior del país y resultando un factor de aislamiento -en lugar de la necesaria integración- entre las poblaciones de un país extenso y relativamente poco poblado.

El caso del corredor 29 (Cipolletti-Neuquén), posiblemente uno de los más caros del mundo en función de su extensión, no escapa a la regla general.

La diferencia importante con otros contratos de concesión es que, en este caso, al no haberse realizado parte de las inversiones comprometidas, se alteró la ecuación económico-financiera de la concesión; la empresa recuperó el capital invertido y obtuvo una rentabilidad superior a la prevista en su oferta. De acuerdo con las normas contractuales, sólo cabe declarar cumplido el