Geografía de las cadenas globales de valor en el contexto de la pandemia
Juan Manuel Pippia * (Especial para sitio IADE-RE) | Actualidad y escenarios de las cadenas globales de valor. La pandemia y su impacto.
Desde la Revolución Industrial, los bienes eran producidos -en su casi totalidad- en una misma fábrica. Por un lado, ingresaban materias primas y trabajadores y, por otra parte, salía el producto finalizado. Empresas y países que producían “desde el comienzo hasta el final” una misma mercadería. Pero a partir de la década del 1950, las empresas estadounidenses comenzaron a trasladar la producción hacia regiones con mano de obra más económica. Y a partir de la década de 1970, también se buscaban países y regiones con menores regulaciones medioambientales, laborales o que ofrecieran beneficios tributarios. Esta tendencia se vio favorecida por la liberalización del comercio, la reducción de los costos del transporte (containers, buques Panamax, carga aérea, etc.), la mejora en las comunicaciones, las políticas de los PED para atraer Inversión Extranjera Directa (IED), entre otros factores. En resumen: las piezas de un producto se fabrican en distintas localizaciones -según las ventajas que ofrezcan-, se conectan a través de operaciones logísticas, se ensamblan en una última localización y, finalmente, se vuelcan al mercado. Es lo que se conoce como la cadena global de valor.
En la década de 1990, una serie de diversos factores, aceleraron la expansión de las CGV. Se disolvió la URSS, PED como India se abrieron al comercio y la IED, China comenzó a recibir IED de Occidente y se produjo la revolución de las tecnologías de la información y comunicación (TIC), entre otros cambios. Las CGV arribaron a nuevos destinos, aumentaron su productividad y pudieron ofrecer bienes y servicios a precios más económicos.
* Licenciado en Ciencia Política (UBA). Magister en Relaciones y Negociaciones Internacionales (FLACSO - San Andrés) | 15-04-2021.