El padre de los pobres: Don Martín Miguel de Güemes
Martín Miguel de Güemes, líder de la guerra gaucha, personaje olvidado y maltratado por la historia oficial. Ya en 1907 fue eje del debate ¿Podía ser un prócer un gaucho? Debate fuerte y sostenido por quien fuera la cabeza del Ministerio de Educación, Ramos Mejía.
Güemes hombre fuerte y fundamental en la guerra de independencia, nació en Salta el 08 de febrero de 1785, en el seno de una familia acomodada, condición esta que plantea otro interrogante: ¿Por qué el integrante de una familia “bien”, arriesgaría su vida luchando a la par de “gauchos” y por una nación en ciernes?
Martín tuvo 7 hermanos, de los cuales se destacarían su hermano mayor Juan, miembro del cabildo de Salta y por quien fuera elegido, más tarde, para desempeñar la gobernación de la provincia, y María Magdalena Damasa Güemes de Tejeda, más conocida como “Macacha Güemes”, muy cercana a Martín y muy interesada por los asuntos de la patria, asumiría de hecho la gobernación de Salta, cuando Martín Miguel así lo requería, encargándose de la cuestión de los asuntos público de la provincia, fue la primera mujer gobernadora, de hecho.
Güemes contuvo 9 invasiones españolas, ingresó a la carrera militar a los 14 años y participó en la defensa de Buenos Aires durante las Invasiones Inglesas, circunstancia en la que fue protagonista de un hecho insólito: la captura de un barco por una fuerza de caballería en ocasión de una bajante del Río de la Plata, oportunidad que fue aprovechada por Liniers que ordenó atacar a la nave, a un grupo de jinetes comandado por Martín Güemes.
Tras la Revolución de 1810, se incorporó al ejército patriota destinado al Alto Perú y colaboró decididamente. En 1812, después del desastre de Huaqui, Belgrano recibe de Pueyrredón el 26 de marzo de ese año el Ejército del Norte en Yatasto, en cuyas filas militaba Martín Güemes con el grado de Teniente Coronel Graduado, y que por su conducta licenciosa no cuadraba con la moral cristiana de Belgrano, razón por la cual, fue separado del ejército en Junio y destinado a vivir en Santiago Del Estero por unos meses.
En 1815, gracias a su experiencia militar, se puso al frente de la resistencia a los realistas y el 15 de mayo fue electo como gobernador de su provincia natal. Era la primera vez que las autoridades de Salta eran elegidas por los propios salteños desde 1810, lo que significó la autonomía de Salta en franca desobediencia a la autoridad del Directorio. Ejerció este cargo hasta 1820. Dos semanas después de asumir el gobierno contrajo matrimonio con Carmen Puch, miembro de una acaudalada familia, y con la que tuvo tres hijos. Durante su mandato creó el Regimiento de los Infernales, a los efectos de reunir en un cuerpo orgánico a los gauchos, que hasta ese entonces había combatido desinteresadamente por la libertad de la patria, la creación de esta unidad estaba destinada a combatir a pie o caballo, revelaba el interés de Güemes de disponer de una unidad del tipo de los “Dragones”, de los españoles, apto para su movilidad para cubrir largos trayectos y efectuar la defensa de pasos, desfiladeros, bañados o lugares de difícil tránsito o acceso.
Con muy escasos recursos libró una casi constante guerra defensiva desplegando como táctica la “guerra de guerrillas o guerra de recursos”, que consistía en hostigar el enemigo utilizando el conocimiento del terreno mediante ataques rápidos y sorpresivos. El ascendiente que tenía Güemes sobre sus milicias gauchas por su condición de caudillo y el hecho de ser, a la vez un pundonoroso militar de carrera, le permitieron ser obedecido ejemplarmente.
A principios de 1821, el gobernador de Santiago del Estero Juan Felipe Ibarra, pidió auxilio a Güemes, ya que el gobernador Bernabé Aráoz de Tucumán, trataba de volver a la provincia santiagueña a la obediencia a su gobierno. Güemes invadió Tucumán más para apoderarse de las armas que necesitaba.
Güemes murió el 17 de junio de 1821, a los 36 años de edad en la cañada de la Horqueta, cerca de la ciudad de Salta por una herida de bala de parte del Coronel José María Valdés, alias “Barbucho”, español nativo de Valencia, radicado desde hacía décadas en la región por lo que conocía los múltiples senderos pocos transitados.
Güemes supo entender los reclamos populares del gauchaje, a quienes posibilitó el ascenso social distribuyendo tierras entre los más pobres, por esto fue llamado “padre de los pobres”. Se destacó por su prédica y su práctica de la justicia social. Sus gauchos lo amaron y juntos, ganaron un lugar en la historia de la independencia.
Güemes cumplió con heroísmo y sagacidad su misión, su valentía generó la admiración del libertador José de San Martín, su sentido justo fue recompensado con la lealtad de sus gauchos, que lo veneraron más allá de su muerte. Tuvo la gloria de morir por la causa de su elección, la de América entera.
Por todo lo anteriormente expresado, Güemes es y será el prócer de todos los argentinos. “A nada temo -decía-, porque he jurado defender la Independencia de América, y sellarla con mi sangre. Todos estamos dispuestos a morir primero, que sufrir por segunda vez una dominación odiosa, tiránica y execrable”.
UNSE - 17 de junio de 2021