El convidado de piedra: la cuestión agraria, los trabajadores y la política kirchnerista
Una de las peculiaridades de este conflicto, es que el enfrentamiento se produce no porque el sector agrario esté en crisis, sino porque está en su mejor momento histórico. Contra un gobierno que no está en decadencia ni asediado por circunstancias adversas, sino que, por el contrario, goza de superávits de todo tipo y un respaldo político que pudo verse en la Plaza de Mayo. Así las cosas, el asunto parecería de resolución sencilla: bastaría reconocer que al gobierno se le fue la mano, que se equivocó, y retrotraer las retenciones al estadio inmediato anterior, momento en el cual la cesión de ingresos por la economía agropecuaria alcanzó su mayor nivel histórico. Una avaricia fiscal innecesaria, corregible con un gesto de humildad. Sin embargo, nos encontramos frente al problema en el que se subsumen todos los problemas, el nudo de una situación explosiva.
Fuente: Centro de Estudios e Investigaciones en Ciencias Sociales (CEICS)