Un daño enorme, más allá del “cierre”
El gobierno está reabriendo, y no hubo default. Volvieron los días buenos ¿no?
Bueno, no. El Congreso ha votado un arreglo temporario, por unos pocos meses. Uno diría que los republicanos tendrían que estar locos para provocar otra confrontación. Pero ya estuvieron tan locos, ¿por qué suponer que aprendieron?
Las opciones ante la amenaza, todas dañinas
Así que los republicanos parecen haber decidido elevar el techo de endeudamiento sin condiciones, aunque los detalles no son claros. Tal vez sea el fin de esa extraña táctica de extorsión, o tal vez no, porque, en el mejor de los casos, sólo estamos ante una extensión transitoria y muy breve. La amenaza de tocar el techo de deuda sigue existiendo, especialmente si la política de parálisis del gobierno sigue yendo en contra del Partido Republicano.
El temor al default de EE.UU: una tormenta que puede arrastrar al mundo
Todo aquel que recuerde el colapso de Lehman Brothers, hace poco más de cinco años, sabe lo que significa un desastre financiero global. Un default del gobierno de Estados Unidos , del que nos separan apenas unos días si el Congreso no logra elevar el techo de endeudamiento antes del jueves próximo, será una calamidad económica nunca vista.
“No estábamos peleando por un café” - Entrevista a Jorge Remes Lenicov por Eduardo Anguita
Autor de un libro que recorre los cuatro meses de su gestión y del proceso desde el default hasta la pesificación. Las presiones de los grupos dominantes, financieros, industriales, agroexportadores y en particular del Grupo Clarín.
Antes de comenzar la entrevista tenía dudas de preguntarle sobre enero de 2002. “¿Lo meto en aquel infierno?”, me preguntaba. Y usted me recibe con su libro Bases para una economía productiva. El programa de enero-abril de 2002 y la rápida recuperación de la economía argentina, de la editorial Miño y Dávila, publicado en octubre de 2012. Arranquemos entonces por aquel 2 de enero de 2002.