Caputo, Sturzenegger y el FMI

El plan económico de Caputo va llegando a su fin, sin el ingreso de nuevos dólares que hagan sostenible el ancla cambiaria. La alternativa que se baraja es un programa económico más ligado al perfil de Federico Sturzenegger, coincidente con lo recomendado por el FMI. La “transición” del programa económico se da en un escenario en donde las variables económicas de la economía real caen significativamente. A la caída del salario en el primer semestre del año se le suman un significativo aumento en el nivel de desempleo y caída de la actividad. En su último documento técnico el FMI sugirió eliminar el “cepo” y modificar la política cambiaria hacia un esquema de libre flotación, política que en Argentina suena a devaluación. Bajo el argumento de que la disciplina fiscal es suficiente para sostener el dólar sin una disparada, incurrir en este camino puede terminar disparando las tasas de inflación e hiriendo de muerte al proyecto político libertario. La decisión de otorgar o no nuevo financiamiento a la Argentina y condicionalidades exigidas serán elementos que darán al FMI el rol de juez en esta disputa por el mando económico. En cualquier caso, no vemos lugar para una pronta recuperación de la economía.

Rumbo al iceberg

Milei lo expresó con toda claridad: la inflación es un fenómeno exclusivamente monetario. Y como remataría el vocero Adorni: fin. Lo cierto es que todo ese mantra monetarista, confrontado con la realidad de la evolución de los precios locales, empezó a hacer agua.