Documento de Trabajo Nº48
La crisis internacional de 2008-2009 encontró a los países de América latina con un margen de maniobra inédito para instrumentar paquetes de política fiscal contracíclica (CEPAL, 2012; Fernández-Arias y Montiel, 2009; Ghosh et al., 2009). Si bien existieron factores exógenos que favorecieron la recuperación de la región hacia fines de 2009, incluyendo la reacción contracíclica inicial de las economías avanzadas y China.
Así como el (también inédito) despliegue contracíclico del Fondo Monetario Internacional (que en el tercer trimestre de 2009 asignó US$ 250.000 millones en Derechos Especiales de Giro al conjunto de su membresía), los mencionados paquetes fiscales tuvieron una incidencia significativa en el repunte de los indicadores de actividad y empleo en el bienio 2010-2011.
Este novedoso margen de maniobra fiscal suele atribuirse a una gestión más ordenada de las cuentas públicas durante el período anterior a la crisis, en general asociada a una conducta fiscal contracíclica en la administración de los recursos y los pasivos del sector público entre 2003 y 2008 (Gutiérrez y Revilla, 2010; Daude et al., 2010; Calderón y Fajnzylber, 2009; Loser, 2009). Se trata, por cierto, del período en el que la introducción de reglas fiscales comienza a cobrar notoriedad en la región, con la regla chilena de balance estructural y, más recientemente, la regla colombiana, como casos paradigmáticos, lo que contribuyó a reforzar la idea de que la capacidad de Documento de Trabajo Nº48 - marzo de 2013