El plan de Macri: la recesión programada
Han pasado algo más de 100 días del gobierno de la derecha en la Argentina y hay mucha gente que aún se ilusiona con sus promesas. Ello a pesar de los evidentes signos que demuestran que el rumbo real va en el sentido contrario a sus palabras, comenzando por el incremento violento de la inflación que se disparó desde el anuncio de la devaluación, el recorte de programas sociales y el despido de miles de empleados públicos que los atendían, una creciente desocupación en las actividades privadas, los entreguistas acuerdos con los fondos buitre con su usuraria carga de capital, intereses y endeudamientos potenciales.
Despiste conceptual
El acuerdo para el pago a los fondos buitre no es una acción de gobierno aislada, sino la consolidación de un cambio de régimen económico que conduce a un nuevo ciclo largo de endeudamiento y de pérdida de grados de libertad de la política económica. Funcionarios, economistas, legisladores y gobernadores repitieron a coro que la nueva maravilla, gracias a la entrada de capitales y nuevo endeudamiento, permitirá morigerar el ajuste fiscal al que obligaría la pesada herencia recibida.
La Argentina como plusvalía
La historia de un país, como ninguna otra historia, no puede resumirse en una serie de imágenes fijas y repetitivas. Pero en el caso de la deuda externa argentina hay una genealogía, si podemos emplear este término, que puede seguirse desde el siglo XIX hasta hoy. Hay una gran bibliografía al respecto, de todas las corrientes historiográficas, hay sentencias de muchos jueces, hay una conciencia pública mayoritariamente condenatoria, cuya historia también es posible hacer.
La naturaleza política y económica de la alianza Cambiemos
Los resultados de las últimas elecciones presidenciales produjeron no sólo un hecho sorprendente sino inédito porque por primera vez en la historia moderna del país los sectores dominantes accedieron al control del Estado mediante un partido propio y el voto ejercido democráticamente. De esta manera quedó atrás la necesidad de estos sectores de tener que recurrir al “fraude patriótico” como en la década de 1930 o a los golpes de Estado llevados a cabo por el partido militar desde el derrocamiento del peronismo en 1955.
Se trata de un resultado coherente con las nuevas formas de condicionar la política estatal que surgieron en la década de 1980 durante la postdictadura en el marco del nuevo patrón de acumulación basado en la valorización financiera del capital.
A la búsqueda de posibles criterios para la reflexión política actual en la Argentina
En nuestro país, la derecha ha pasado de la hegemonía al dominio. ¿Cómo? ¿No es que había hegemonía de un proyecto nacional y popular? Que esté pasando lo que está pasando, y cómo está pasando muestra que no. No sólo porque el control de la comunicación nunca fue doblegado (y no me limito a los juzgados), sino porque el orden hegemónico nunca dejó de estar marcado por la combinación de dominio y consenso del proyecto neoconservador de orden global.
Economía no observada (ENO) en Argentina. Vínculos con la fuga de capitales.
La importancia que tiene el aportar conocimiento respecto de los componentes de la “Economía No Observada” (ENO) en la Argentina no solo está dada por lo limitado del material disponible al respecto, por las numerosas discusiones metodológicas pendientes o por la gran relevancia económica que presenta en Argentina y el mundo.
La situación económica internacional y la Argentina
¿Cuál es la situación económica internacional, cómo ha evolucionado en los últimos años y cómo afecta a la Argentina? Estos son los principales interrogantes que se analizan brevemente en este artículo.
“Una gran transferencia a los ricos”
“Las primeras medidas del gobierno de Mauricio Macri son preocupantes: en particular, el recorte permanente en los impuestos a la exportación es una gran transferencia a los ricos, con un gran costo para los trabajadores ordinarios. Cualquiera que sean los beneficios de eficiencia, las consecuencias distributivas y para el desarrollo no pueden ser ignoradas”, señaló ayer el Premio Nobel en Economía, Joseph Stiglitz, en un artículo que firmó junto al economista Martín Guzmán. El economista alertó también sobre los riesgos de la devaluación en los precios internos a través de una suba de los bienes transables (exportables) y los importados y la caída del mercado interno producto de los despidos. “A la vista de las crecientes presiones inflacionarias, el Banco Central probablemente elevará las tasas de interés. Si se hace con cuidado, esto podría reducir la demanda suficiente para restaurar un aparente equilibrio macroeconómico”, remarca. No obstante, alerta que incluso si se dan estas condiciones, el aumento de despidos en distintos sectores donde no haya cuellos de botella lo más probable es que empuje hacia arriba la tasa general de desempleo, y con la inflación sólo domesticada en parte, la actividad caería en un proceso de estanflación.
Las perspectivas inciertas de la Argentina
Las acciones iniciales del gobierno son preocupantes: en particular, el recorte permanente en los impuestos a las exportaciones que significa una gran transferencia hacia los ricos, a un gran costo para los trabajadores comunes y corrientes. Cualesquiera que sean los beneficios de eficiencia, no se pueden ignorar las consecuencias distributivas y las implicaciones para el desarrollo.
¿Cuáles son los límites de la derecha en América Latina?
Clima de euforia en los medios de la derecha latinoamericana, después de década y media de sucesivas frustraciones. Creen que pueden volver a ser protagonistas de la historia latinoamericana contemporánea. En los medios financieros y en los medios de información internacionales, hay verdadera euforia.
El ímpetu con que actúan en Argentina y en Venezuela puede dar la impresión de que saben hacia dónde quieren ir, que tienen la clave del futuro de nuestras sociedades, que se han renovado al punto de poder volverse fuerza hegemónica en la región. Critican a los gobiernos progresistas, como si se tratara de un ciclo agotado, al cual ellos se proponen suceder y superar.