Ropa sin esclavos: renacer en las cooperativas textiles libres de trata

Si supieras que tu teléfono celular fue producto de un arrebato en el subte, ¿lo usarías para whatsappear tranquilamente con tus amigos? O si te dijeran que el estéreo del auto está manchado con sangre, ¿podrías manejar por la ciudad y escuchar música sin culpa? Y si tus camisas, remeras, jeans o vestidos fueron confeccionados por inmigrantes reducidos a la servidumbre, sometidos a jornadas laborales de 16 horas, hacinados en pequeñas habitaciones, despojados de su documentación y mal alimentados, ¿sentirías la libertad de mirarte al espejo? Tal vez ha llegado la hora de preguntarse: ¿quién hizo esa ropa?

Se estima que en toda el área metropolitana los "talleres del sudor", o "talleres esclavos", son abastecidos por una red de 30.000 obreros costureros, en su mayoría provenientes de Bolivia. Sólo en la ciudad de Buenos Aires estarían asentados al menos 3000 espacios clandestinos donde se confeccionan miles de prendas por semana. Hay quienes arriesgan que el 80% de la indumentaria que circula por todo el país proviene del circuito ilegal.

Neomalthusianismo y feminismo

En la excelente encíclica ecológica del Papa Francisco hay sin embargo un par de párrafos con los que me siento en desacuerdo. La encíclica peligrosamente le quita importancia al aumento de la población humana, desecha el concepto de "salud reproductiva" y niega despiadadamente el derecho al aborto. Veamos el contexto.

Laudato Si´ encíclica del Papa Francisco

1. Laudato si’, mi’ Signore » – « Alabado seas, mi Señor », cantaba san Francisco de Asís. En ese hermoso cántico nos recordaba que nuestra casa común es también como una hermana, con la cual compartimos la existencia, y como una madre bella que nos acoge entre sus brazos: « Alabado seas, mi Señor, por la hermana nuestra madre tierra, la cual nos sustenta, y gobierna y produce diversos frutos con coloridas flores y hierba ».

2. Esta hermana clama por el daño que le provocamos a causa del uso irresponsable y del abuso de los bienes que Dios ha puesto en ella. Hemos crecido pensando que éramos sus propietarios y dominadores, autorizados a expoliarla. La violencia que hay en el corazón humano, herido por el pecado, también se manifiesta en los síntomas de enfermedad que advertimos en el suelo, en el agua, en el aire y en los seres vivientes. Por eso, entre los pobres más abandonados y maltratados, está nuestra oprimida y devastada tierra, que « gime y sufre dolores de parto » (Rm 8,22). Olvidamos que nosotros mismos somos tierra (cf. Gn 2,7). Nuestro propio cuerpo está constituido por los elementos del planeta, su aire es el que nos da el aliento y su agua nos vivifica y restaura.

La encíclica ecologista del papa Francisco

En medio de polémicas y tensiones, el papa Francisco hace pública su encíclica Alabado seas, sobre el cuidado de la casa común, en la que advierte los gravísimos problemas del medio ambiente y hace responsable al sistema económico mundial de llevar a la humanidad al borde del colapso, por carecer de sustento ético. La voracidad del capitalismo de mercado y del dios dinero están llevando a la humanidad también a la contaminación del alma del ser humano y la corrosión de su espíritu.

Matanza en Carolina del Sur

Decir que el racismo está flor de piel en los Estados Unidos es llover sobre mojado. Permanentemente, la comunidad afroamericana viene siendo agredida de las formas más brutales. Algunas de ellas han sido documentadas, sobre todo las que involucran a las fuerzas policiales, y circulan profusamente por internet. Hay protestas e indignación, es cierto, pero no lo suficiente. Se trata de un problema nacional que debería ser abordado con mucho mayor ímpetu.

La matanza de Charleston: necesitamos oraciones, pero también acabar con este genocidio político

De un modo que no es distinto al de cuando cuatro niñas fueron asesinadas en un atentado con bomba en una iglesia de Birmingham, en el estado de Alabama, en 1963, nuestro país y el mundo se sienten apenados y escandalizados por el odio y la matanza sin sentido de nueve afroamericanos en la histórica iglesia Emanuel AME (Africana Metodista Episcopal) de Charleston, en Carolina del Sur. Entre los muertos se cuentan su pastor y un senador del estado. Hace tres décadas Operación Empuje (Operation Push), la organización que fundé en 1971 para mejorar el estatus económico de los afroamericanos, celebró su convención nacional en esta iglesia.

El brazo de la ley en EE.UU. se extiende

Arrestado en Djibouti mientras se trasladaba de Somalia a Yemen, lejos de su hogar en Gran Bretaña, Madhi Hashi se quedó desconcertado al hallarse encarcelado en Manhattan.

Admitió ser miembro del Shabab, el grupo miliciano somalí. Pero no entendía “por qué había sido llevado a Estados Unidos para ser enjuiciado”, señaló, de acuerdo con documentos legales.

El mundo del futbol se vio sacudido por una sorpresa similar a fines del mes pasado, con gente impactada desde Italia hasta Argentina, cuando la Procuradora estadounidense Loretta E. Lynch anunció que fiscales de Brooklyn habían acusado formalmente de corrupción a funcionarios de la FIFA desde el otro lado del mundo.

El desafío industrial

El desarrollo de la industria nacional enfrenta grandes desafíos para poder dar un salto cualitativo y volver a crecer fuerte como entre 2003 y 2011. Efectivamente, el sector debe superar obstáculos que trascienden el estancamiento de los últimos años. Un análisis riguroso requiere revisar la dinámica histórica y los cambios estructurales en la organización de la producción que se generaron a nivel local e internacional en las últimas décadas y sus implicancias.

Después de que el PBI industrial per cápita se desplomara un 40 por ciento entre 1977 y 2002, sus consecuencias no pueden resumirse en términos de caída de la producción física.