Desregulación financiera y endeudamiento
Luego de la salida de la convertibilidad tres medidas imponen un quiebre en relación a la dinámica de las tres décadas previas: (1) política de desendeudamiento, (2) límites a los capitales de corto plazo y (3) tasas de interés bajas. La primera implicó el pago de los compromisos asumidos previamente y quebró la lógica de equilibrar las cuentas externas a partir del ingreso de deuda. La segunda significó ponerle a los capitales especulativos de corto plazo límites tales como 365 días de permanencia mínima e inmovilizar el 30 por ciento del monto ingresado en forma de encaje. La tercera fue que las tasas de interés real locales sean menores a las internacionales, desalentando también por esta vía el ingreso de capitales especulativos.
Página/12 - 4 de enero de 2016