Asesinato de Jovenel Moïse: ¿El punto cúlmine de la crisis en Haití?

En estos días Haití -país que no suele aparecer en los medios internacionales a no ser que se hable de su pobreza– fue noticia por el asesinato de su presidente de facto Jovenel Moïse. En la madrugada del miércoles pasado un grupo de hombres armados ingresó a la residencia del mandatario y lo acribilló. También resultó herida su esposa Martine Moïse, quien fue trasladada horas más tarde a un hospital en Estados Unidos.

¡Cuba vence y vencerá!

Al unísono con el pueblo revolucionario cubano, la Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad (REDH) llama al mundo entero a mantenerse alerta y oponerse a las movidas injerencistas que el gobierno de Estados Unidos y sus adláteres pretenden aplicar en Cuba.

La ruta de las granadas

Los gobiernos de Alberto Fernández y Luis Arce investigan el recorrido de los 40.000 cartuchos antitumultos, los gases lacrimógenos y más de 100 granadas de gas que, según una nota aparecida en la embajada argentina en La Paz, envió la gestión de Mauricio Macri a los golpistas bolivianos.

La ola de luchas y la experiencia del peru

Las luchas populares en América latina siguen creciendo, y parecen confirmar un nuevo período de gobiernos democráticos y populares. Un momento de aguda disputa entre los grupos concentrados del poder económico y las fuerzas populares. Dos modelos se contraponen. Uno, que con sus recetas neoliberales, agudizó las profundas desigualdades que caracterizan el continente que la pandemia de Covid-19, mostró con claridad. El otro, que amplió derechos y mejora la vida de los sectores populares.  

Biden y Duque se saludan

A finales de junio, Iván Duque recibió un llamado telefónico de Joe Biden que fue muy comentado en Colombia ya que el presidente de los Estados Unidos tardó seis meses en levantar el teléfono para conversar con uno de sus principales aliados estratégicos en América Latina.

Por las venas abiertas de Colombia sangra Latinoamérica.

Recientemente visité Colombia, y luego de observar esa lucha por la vida de su pueblo, contra el neoliberalismo insaciable del uribismo, se hace inevitable pensar que hay en Colombia, una herida abierta por la que sangra hoy Latinoamérica entera. Por aquello que no fue, pero también por la lucha de aquello que aún es posible. Es precisamente en Colombia donde habita el derrotero del sueño nuestroamericano. Allí donde Santander, en nombre de la ley y la norma, echó por tierra el legado de Simón Bolívar, Manuela Sáenz, José de San Martín y tantes otres.