La política argentina ante la emergencia climática y la transición ecológica
Una propuesta para que en la mesa grande donde se debate el modelo de país no falte una discusión profunda y veraz sobre el derecho al futuro que reclaman las nuevas generaciones. Es la primera parte de un programa de compromiso nacional ante una crisis que ya comienza a mostrar sus gravísimas consecuencias.
La verdad a medias
Hace menos de un año “The Economist” –una prestigiada revista inglesa– sostuvo en su editorial, que Trump representa “una nueva edad de lo que podría llamarse la post-verdad”. Según la revista, en esta nueva edad sus voceros ya no se preocupan de las evidencias ni de las ciencias.
Energía eólica: las lecciones del "mundo" y el plan RenovAr
Detrás del discurso del calentamiento global, y su consecuente idea del ser humano como enemigo principal del Planeta y, paradójicamente, la humanidad, se esconden poderosos sectores de lobby que pugnan por la incorporación masiva de fuentes renovables (eólica y solar) en un importante cúmulo de naciones, pero principalmente en las naciones en vías de desarrollo.
La COP21 de París y la propuesta del “Anexo 0”
Faltó en París el empuje y el entusiasmo en la calle del medio millón de manifestantes que podían esperarse, pidiendo justicia climática. La matanza del 13 de noviembre (centenares de jóvenes muertos o heridos) quitó el ánimo de quienes iban a manifestarse, tanto de los parisinos como los que iban a llegar de fuera. Como ocurrió tras el 11 de septiembre 2001, la agenda alternativa de los movimientos socio-ambientales en el Norte y en el Sur, es brutalmente aplazada y desviada por esos atentados masivos y por las realidades de las guerras (aunque sean guerras por petróleo). Los valientes esfuerzos de manifestarse para pedir un “clima de paz” en las calles de París no pudieron sustituir la masa de gente en la calle que hubiera presionado a los gobernantes mundiales.
Convención Marco sobre el Cambio Climático
La Conferencia de las Partes,
Recordando la decisión 1/CP.17, relativa al establecimiento del Grupo de Trabajo Especial sobre la Plataforma de Durban para una Acción Reforzada,
Recordando también los artículos 2, 3 y 4 de la Convención,
Recordando además las decisiones pertinentes de la Conferencia de las Partes, entre ellas las decisiones 1/CP.16, 2/CP.18, 1/CP.19 y 1/CP.20,
Acogiendo con satisfacción la aprobación de la resolución A/RES/70/1 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, titulada “Transformar nuestro mundo: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible”, en particular su objetivo 13, así como la aprobación de la Agenda de Acción de Addis Abeba de la Tercera Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo y la aprobación del Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres
Las metas de la COP21 y la geoingeniería
Uno de los temas más álgidos en la reunión global de la Convención de Naciones Unidas sobre el cambio climático que finalizó el 12 de diciembre en París (COP 21), fue la definición de una nueva meta de calentamiento global que no se podría sobrepasar. Países insulares y otros del tercer mundo, desde hace años plantean que no sobrevivirán un calentamiento global mayor a 1, 5 oC, ya que su territorio desaparecería por el aumento del nivel del mar y otros desastres. Razones más que atendibles, que se suman a que esos países no son los que han causado el cambio climático.
Acuerdo de Paris en cambio climático: aplausos errados
En París se acaba de firmar un acuerdo sobre cambio climático que ha sido recibido con un júbilo y optimismo bastante exagerado. Se tolera disimuladamente que siga aumentando la temperatura global, se repiten unos cuantos acuerdos que ya habían sido alcanzados en previas cumbres, y todo descansa en compromisos voluntarios de los países, sin obligaciones precisas.
¿Por qué no ponerles nombres de empresas petrolíferas a los huracanes?
Mientras los bravos neoyorquinos inician la tarea de poner a secar la ciudad, he aquí lo que se me ocurrió la noche pasada contemplando a distancia esas horripilantes imágenes. Evidentemente, no se trata de algo crucial, pero a largo plazo podría marcar la diferencia. ¿Por qué no dejamos de ponerles nombres de personas a los huracanes y los denominamos como las compañías petrolíferas?
A dos años de Katrina
Hoy se sabe que el causante de los desastres climáticos es el caótico crecimiento del sistema capitalista, que provoca el calentamiento global y además potencia los efectos negativos de los desastres aumentando la vulnerabilidad de la poblaciones, afectadas por falta de planificación urbana, la irracional ocupación del espacio publico y los deficientes sistemas de ayuda en tiempo de crisis. A dos años de Katrina, el siguiente informe pretende dar cuenta de las complejas variables que definen este crítico proceso.
Congreso, Asume Chertoff su responsabilidad por los errores en la crisis de Katrina
Estafas de varios millones de dólares en los subsidios a las víctimas:
Demócratas piden renuncia del secretario de Seguridad
AFP Y DPA
Fuente: La Jornada